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Itziar Ituño: “La visión de Machu Picchu te corta la respiración”

Lisboa, la peruana Iquitos, Zanzíbar y el parque natural de Urquiola. La actriz de ‘La casa de papel’ nos descubre sus rincones favoritos

La actriz Itziar Ituño.
La actriz Itziar Ituño.SANTI BURGOS

No se cansa de ir a Lisboa —curiosamente el alias de su personaje en la serie La casa de papel, que recientemente ha estrenado su cuarta temporada en Netflix— y se ha quedado fascinada con la peruana Iquitos. Terminado el rodaje del thriller rural vasco Hil-Kanpaiak, la actriz Itziar Ituño nos descubre sus rincones favoritos

¿Dónde acaba de viajar?

He pasado unas vacaciones en Iquitos. Es la Amazonía peruana, pero, por suerte, el fuego del pasado verano no llegó allí.

¿En qué lugar del mundo se ha sentido más feliz?

En Iquitos, pero también en Zanzíbar, por el color turquesa que tiene el mar. No lo he vuelto a ver tan intenso.

Vista de la impresionante ciudadela de Machu Picchu (Perú).
Vista de la impresionante ciudadela de Machu Picchu (Perú).Go Ga (getty images)

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Sin duda, Machu Picchu. De repente aparece ante tus ojos y se te corta la respiración.

¿Su destino favorito?

No me canso de ir a Lisboa, por placer y por trabajo. Tiene un punto melancólico, me encanta esa faceta como de ciudad estancada en el tiempo.

¿Y su vista preferida?

La que se ve en el parque natural de Urquiola: los montes más altos de Bizkaia, como el Amboto.

Uno de los pozos que esconde la fastuosa finca de la Quinta da Regaleira, protegida por la Unesco, en Sintra (Portugal).
Uno de los pozos que esconde la fastuosa finca de la Quinta da Regaleira, protegida por la Unesco, en Sintra (Portugal).getty images

¿Algún rinconcito estupendo que conozca?

Quinta da Regaleira, en Sintra (Portugal). Una finca con una mansión, jardines, laberintos, pozos secretos… Y el restaurantito Eneperi frente a San Juan de Gaztelugatxe, donde tomarte algo con unas vistas preciosas frente al mar.

¿Algún placer inconfesable cuando va de viaje?

Como viajo con cuatro cosas en la mochila, me permito pasar varios días con el mismo pantalón.

Un recuerdo de las vacaciones de su niñez.

Cuando hacíamos acampada libre con mis padres en cualquier playa, por ejemplo en Cantabria.

En corto

¿Dónde voló por primera vez? Londres, con 23 años.

¿El souvenir más lamentable que ha comprado? Imanes de nevera y llaveros horrendos para regalar.

¿Un desastre vacacional? Quedarme sin vacaciones cuando tenía planeado un viaje a Argentina.

Algo que no falta en su mochila. El rímel y la navajita multiusos.

¿Cuál es la persona más interesante que ha conocido en sus viajes?

Fernando Fonseca, un poeta rural de Iquitos que vende mermeladas y manteca de cacahuete caseras, y con ese dinero publica sus libros de cuentos y poemas. Sueña con abrir una biblioteca y un observatorio astronómico en la selva.

¿Hay algún transporte que deteste especialmente?

El autobús no me hace mucha gracia.

Confiese qué se llevó de un hotel.

Una toalla, porque en mi mochila no tenía ninguna.

Describa un plato memorable que probó de viaje.

Viajando por Tanzania en un autobús de línea aparecieron unas señoras que vendían samosas, unas empanadillas indias de verduras que allí también se comen. Las compré desde la ventanilla.

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