Ciervo busca pareja en Londres
La berrea de más de 600 gamos y ciervos salvajes es un espectáculo en Richmond Park, a 16 kilómetros del centro de la capital británica
“Un jardín inglés es sin duda un lugar interesante para una vaca, pero del todo incapaz de alimentar el corazón de un hombre”, escribió el viajero chino Chiang Yee, que recorrió Reino Unido entre 1933 y 1955 contando sus impresiones en una serie de guías de viaje tituladas The Silent Traveller (El viajero silencioso).
Inmunes a esta maliciosa opinión, los parques y jardines que adornan Londres son una fuente de sorpresas. Uno de los menos conocidos por los turistas es Richmond Park, a 16 kilómetros al oeste del centro y el mayor espacio verde de la ciudad. Este antiguo cazadero de la corona conserva su aire montaraz: desde 1520 cuenta con una población fija de más de 600 gamos y ciervos salvajes, como el ciervo macho que brama junto a dos hembras en la fotografía, tomada el pasado 2 de octubre durante la berrea.
En España, este espectáculo otoñal se puede disfrutar en lugares como Cazorla, Monfragüe o, a un paso de Madrid, el monte del Pardo.