
La burla nihilista
El discurso irracional triunfa pero, paradójicamente, somos señalados como enemigos de la libertad quienes defendemos la necesidad de un cambio
El discurso irracional triunfa pero, paradójicamente, somos señalados como enemigos de la libertad quienes defendemos la necesidad de un cambio
Contrastando con la insoportable y muda realidad de muchos ciudadanos, en las sesiones parlamentarias hay quienes agitan el miedo y la mentira
Para hacernos imprescindibles no debemos desaparecer ni un día. Nuestra presencia está para dar aliento
La educación virtual nos muestra también una realidad que no debemos ignorar: hay familias que no tienen ordenador y padres que no disponen de tiempo o capacitación para ayudar a los hijos en la tarea
Necesitamos imaginar que esta experiencia colectiva, traumática, nos hará, por así decirlo, mejores personas. Más atentos a lo esencial, menos anhelantes de lo prescindible
Vivir en esta inédita situación nos tendría que cambiar a los que nos encontramos en mejor situación
Hay momentos en la vida en que necesitamos un padre que nos explique cómo comportarnos
Hoy la furia es la expresión con más prestigio de todo el catálogo de sentimientos
Se respira hoy un discurso tan radical en contra de la intervención del Estado como limitador de la codicia empresarial que estamos obligados a estar alerta
Habría que recordar que hubo otra juventud en esos años, la hubo, aunque en las fotos solo aparezcan ciertos bares y ciertos rostros
Gracias a Ceija y a sus hermanos, notables músicos, los gitanos tienen hoy voces que cuentan su memoria. Sobrevivieron al nazismo, pero sufren el racismo
Pepa es esa mujer sabia que intuye que una sola aparición suya atraería el tufillo de la curiosidad malsana y destrozaría su intimidad
Es inaudito que preocupe más una charla sobre sexualidad impartida en el colegio que lo que un niño recibe por un dispositivo electrónico
En lo que a educación se refiere, sigue separándose lo intelectual de lo manual. Me irrita
Parece mentira que en estos recién estrenados años 20 aún tengamos que hablar del derecho de las mujeres a interrumpir un embarazo o a ser soberanas en las decisiones reproductivas
Habrá quien considere que esto es una denuncia a destiempo, pero se trata del tiempo que ha necesitado la sociedad para que los abusos vean la luz
Este país no saldrá adelante si no mejora las condiciones de vida de esa generación de jóvenes a la que la crisis dejó colgada
Ha llegado Elsa, la diosa del temporal, y ha arramplado con casi todo de lo que habíamos interiorizado en la Cumbre del Clima
El activismo está superando con creces la capacidad de movilización de los partidos, sobre todo, de los de izquierda. Y es urgente que se replantee la forma en que los ciudadanos nos sumamos a estos compromisos
Lo que irrita es que haya que esperar a los resultados del informe PISA para que hablemos más de lo que está pasando
Cuando escucho a Rocío Monasterio mi mente vuelve a aquellos años en que desayunaba en barras fachas para alimentar el estómago y el oído
Es inaceptable que ahora, con la coartada del feminismo, solo nos hagamos eco del clan de las ganadoras
Pedro y Pablo ahora no quieren que nadie les recuerde sus desavenencias, pero hay que hacerlo, para que no nos manipulen
Todos los dislates que consideraba rarezas o excepciones han engendrado una opción política que hoy sabremos con cuánto apoyo popular cuenta
Jorge de Cascante hace un catálogo de existencias anónimas que gracias a su mirada pueden resumir el sentido de la vida
Definir el franquismo como una “opción” es aberrante, como si no estuviera en su misma naturaleza el sello totalitario que impide la posibilidad de cualquier otra opción política
Era imposible no vivir la excepcionalidad de la jornada de la exhumación de Franco: por un lado, el acto de justicia; por otro, la irrefrenable guasa cañí
¿Quién es el responsable de su delirio? El propio Estado democrático que ha temido actuar como tal y les ha llevado a creer que el alma del abuelo sigue entre nosotros
Me solidarizo con una Ana Blanco con cara de “a ver si se acaba este teatrillo y puedo volver a mi mesa”
Díaz Ayuso no es consciente de que está afirmando lo mismo que Monasterio. Aún diría más, no era consciente de lo que dijo, aunque lo llevara escrito en unas cartulinas
La conversión de la distopía en el género del momento puede provocar, paradójicamente, una indeseable desmovilización
Debiera entender Martínez-Almeida que contemporizar con quien niega lo evidente es una pérdida de tiempo y un insulto a las víctimas
¿Quién es el público que sigue ya esas intervenciones mitineras con que nos martillean en los telediarios del domingo? ¿Quién atenderá a los discursos de una nueva campaña?
Tomarse el trabajo de debatir sobre la difícil sostenibilidad del actual consumo de carne en los países ricos requeriría más esfuerzo intelectual, así que es mejor situarse en el terreno de la gracieta
Para los niños, el verano es ese tiempo ancho que nunca se acaba; para los viejos, la estación del recuerdo
Hay que enseñar a los pequeños que el abuso es innecesario, que el dolor ajeno también debe importar