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Anaga y Playa Grande se van a Eurovisión

La isla de Tenerife sirve de escenario para el vídeo musical de Manel Navarro

Acantilados del macizo de Anaga, en la costa de Taganana, al norte de Tenerife.
Acantilados del macizo de Anaga, en la costa de Taganana, al norte de Tenerife.Jan Wlodarczyk (agefotostock)

Como las liebres, las sugerencias viajeras saltan por donde menos se espera. En la publicidad, en películas. O ambientando un vídeo musical, como el de Manel Navarro de la canción que representará a España en el Festival de Eurovisión 2017, que se celebra el próximo 13 de mayo en la ciudad ucrania de Kiev. Con su tema Do It For Your Lover (hazlo por tu amante), Navarro se ha erigido en prescriptor de la costa tinerfeña.

En su jovial invitación de tres minutos quedan patentes dos Tenerifes como mitades de un mismo círculo: el norte, la península de Anaga, de verde laurisilva consecuencia de las lluvias horizontales, de abruptos paisajes que desarman por su belleza; y el sur, árido y mayormente turístico. En el vídeo promocional —que recuerda mucho el ideario cool del I’m Yours de Jason Mraz— vemos al cantante de Sabadell en el barranco de Taganana. Después, subidos al dron, sobrevolamos el tramo de carretera costera que muere en la playa de Benijo; a lo lejos surgen los roques de Dentro y Fuera desplegando todo su dramatismo. Manel rasguea la guitarra en el Roque de las Bodegas (el puertito de la zona), con el fondo montuoso del macizo de Anaga. Allí se encuentra una estupenda referencia gastronómica, el restaurante La Ola (+34 922 59 03 06). Atención al pulpo caramelizado y a los canelones de bacalao que prepara Enric González.

La segunda parte de la grabación rinde tributo a la iconografía surfera. Para ello se seleccionó una playa de la costa de Arico, preservada del turismo por los pertinaces vientos alisios. Estos golpean sin piedad Playa Grande, protagonista del audiovisual, cuya arena rubia restalla en bajamar, y que surge respaldada por el talud del caserío de Punta de Abona, con el bello santuario de las Mercedes. La franja arenosa está orientada al parque eólico y a la población de Porís de Abona, donde podremos alternar con los últimos pescadores de la zona. Más que para el surf, Playa Grande resulta indicada para el bodyboard.

El faro de Abona es recurrente en la grabación. Son dos las edificaciones fareras, la nueva —una torre normalizada pintada con franjas rojas y blancas— y la vieja, aledañas seguramente para que la veterana (1902) le transmitiera sus experiencias a la de 1978. El faro viejo está previsto que aloje una escuela-taller de cocina. Y si de comer se trata, nada como ir a Tajao para degustar pescado en el restaurante Las Arenas. Final perfecto para una viaje de inspiración musical.

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