El Báltico, a toda vela
El Gulden Leeuw, un velero mayor de tres mástiles y 14 velas construido en Dinamarca en 1937, será una de las atracciones de la regata Barcelona Tall Ships, entre el 21 y el 24 de septiembre
El Gulden Leeuw es un velero mayor de tres mástiles y 14 velas, 57 metros de eslora y 8 de manga. Fue construido en Dinamarca en 1937 y sirvió como buque en investigación científica. Desde 2008 pertenece a la empresa holandesa P&P Charters, que ofrece navegaciones y cursos de vela. Este barco será una de las atracciones de la Barcelona Tall Ships Regatta, que reunirá lo más destacado del mundo de la vela en Port Vell entre el 21 y el 24 de septiembre.
Nos subimos al Gulden Leeuw en julio cuando zarpaba desde el puerto de Helsinki con 13 miembros de la tripulación y 14 jóvenes de diversas nacionalidades a bordo que cursan su formación de vela. “Tenemos la experiencia de que, después de nueve días de aprendizaje, los estudiantes pueden tomar el mando del barco”, dice Robert Postuma, el capitán. El Gulden Leeuw tiene 1.600 metros cuadrados de vela y cerca de ocho kilómetros de cabos. Nuestro destino: el puerto de Kuressaari, en la isla de Saaremaa, en Estonia, a 240 millas náuticas. Nada más salir de la bahía de Helsinki, la tripulación y los estudiantes se ponen manos a la obra. Tras nueve horas de navegación, dejamos atrás el golfo de Finlandia para adentrarnos en el mar Báltico, con olas de cuatro y cinco metros. Tras 47 horas de navegación, el velero atraca en el muelle del puerto de Kuressaari, capital y única ciudad en la isla de Saaremaa, una simpática villa de 15.000 habitantes famosa por sus baños terapéuticos de barro. Es el final de una aventura báltica a toda vela.
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